La organización médico-humanitaria, Médicos Sin Fronteras (MSF) asistirá en el cuidado de pacientes con COVID-19 que serán atendidos a partir de hoy en un hospital auxiliar instalado en el auditorio del equipo de baloncesto, Zonkeys de Tijuana.
Este espacio temporal será operado en conjunto con personal de la Secretaría de Salud de Baja California y su intención es aliviar la carga de pacientes del Hospital General de Tijuana, que hasta el momento se encuentra a un 75 por ciento de su capacidad.
De esta manera, pacientes que se encuentren en fase de recuperación serán trasladados del Hospital General a esta nueva unidad hospitalaria para concluir su tratamiento, ahí estarán de cinco a siete días, lo cual variará caso por caso.
El sitio cuenta con 50 camas, cada una con líneas de oxígeno, zonas de descanso, baños y regaderas, así como con un área de cuidados especiales. También se habilitará un espacio a las afueras para dar informes y asistencia psicológica a los familiares de pacientes.
El equipo de MSF estará conformado por 120 personas, de las cuales, más del 60 por ciento será personal sanitario que permanecerá en la ciudad mientras dure la contingencia sanitaria. Entre ellos están 10 doctores, 16 enfermeros y ocho auxiliares de enfermería que fueron traídos de distintas partes de México.
“Por medio de este apoyo queremos desahogar la enorme carga de trabajo de los trabajadores sanitarios que están respondiendo a esta pandemia y ayudar a aliviar el sufrimiento de los pacientes”, señaló María Rodríguez Rado, encargada de proyecto con MSF en México.
Se estima que el personal de MSF permanecerá en la ciudad de 6 a 8 semanas.
Hasta este miércoles suman 1037 casos positivos y 203 defunciones por COVID-19 en Tijuana. Baja California es el tercer estado con más casos acumulados (1962) y el segundo con más fallecimientos (298) en todo México.
Autoridades en San Diego anticipan un fuerte aumento de casos de coronavirus al sur de la frontera en las próximas dos semanas.
El trabajo de Médicos sin Fronteras es no lucrativo, y respeta los principios de humanidad, independencia, imparcialidad y neutralidad en los lugares donde opera.
MSF decidió dar este apoyo en Tijuana porque se trata de un punto estratégico para combatir la pandemia en México y por tratarse de una ciudad constituida por una población migrante, deportada y con un número elevado de población en situación de calle, explicaron representantes.
“Nosotros vamos a entrar a los lugares donde veamos que la respuesta no es suficiente y que tenemos un valor agregado”, reiteró Laura Gómez, coordinadora del proyecto en Tijuana.
En esta ciudad, las clínicas 1 y 20 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), así como el Hospital General fueron asignados como centros captadores de pacientes con COVID-19.
Sin embargo, se teme que no haya personal médico suficiente ante el aumento de casos.
En el reporte de este miércoles por parte del gobierno de Baja California aún se destaca la convocatoria para contratar personal médico y de enfermería.
Julio Violante, es originario de Morelos y es uno de los doctores de Médicos Sin Fronteras que se encargará del cuidado de pacientes en Tijuana.
“Es un reto y una oportunidad para ayudar al sistema de salud y sobre todo, a las personas que se están viendo más afectados por esta situación”, comentó.
Precisó que el espacio habilitado en la duela de los Zonkeys cuenta con todo lo necesario para atender a pacientes en etapa de recuperación.
Una vez que sean dados de alta, se les pedirá continuar en aislamiento en casa, y permanecerá la comunicación con personal médico.
El espacio que funge como una extensión del Hospital General de Tijuana fue acondicionado por la organización no lucrativa Apoyemos Tijuana.
Alonso Pérez Rico, Secretario de Salud de Baja California destacó esta iniciativa como un esfuerzo que simboliza la colaboración entre sociedad y gobierno para atender la contingencia sanitaria por el COVID-19.